miércoles, 8 de junio de 2011

Fallo del Concurso de Microrrelatos "Ninfosis"

El Jurado del Concurso de Microrrelatos "Ninfosis", organizado por el Plan de Lectura y Biblioteca del IES Murgi de El Ejido, ha decidido conceder por unanimidad los siguientes premios (de entre los 64 relatos presentados al concurso):

Primer premio, dotado con Diploma y Ochenta Euros en libros -elegidos de una librería de El Ejido por el ganador/a- al relato presentado bajo el pseudónimo de: "Escritor/a a media noche". Abierta la plica se comprueba que corresponde a la escritora NEREA VIDAÑA VARGAS, alumna de 2º ESO C.

Segundo premio, dotado con Diploma y Cuarenta Euros en libros -elegidos de una librería de el Ejido por el ganador/a- al relato presentado bajo el pseudónimo de "Shirley". Abierta la plica se comprueba que corresponde a la escritora NURIA ANTEQUERA FERNÁNDEZ, alumna de 2º ESO E.

!Enhorabuena a las ganadoras! Y gracias a todos/as por vuestra participación. Habrá que seguir intentándolo... Nos encontramos en el concurso del próximo curso...

Fotos de las ganadoras recibiendo su Diploma y su Vale de Joaquín Pérez, director, y de Juan José Pérez, miembro del Jurado:




Y aquí podéis leer los dos microrrelatos ganadores:

“Me adormecí… Creía que no podía sentir nada, pero no fue así. Un hormigueo me recorría el cuerpo, y entonces, un escalofrío hizo que abriese los ojos. Fue en ese mismo momento cuando vi todos esos asquerosos bichos trepando por mi cuerpo. En mis inútiles esfuerzos por salir del coche, sentí cientos de pinchazos. El veneno me hizo desfallecer de nuevo.

De repente, desperté en la casa del niño que visité anteriormente, estaba cubierto por la crema que compró Elías.

-Señor… ¿Está bien?
El niño se preocupó.
-Sí, gracias. ¿Me han traído aquí tus padres?
-No, mis padres no han llegado.
-Pero, es tarde. ¿Cuánto hace que los esperas?
-No me acuerdo, hace mucho tiempo.
Aquel niño estaba abandonado.
-¿Cómo te llamas?
-Tampoco lo recuerdo. Nadie habla conmigo desde que murió. Pero ahora ya tengo un nuevo amigo.
-¿Quién murió?
-Mi amigo, el repartidor del supermercado.
El niño me ató pies y manos y me llevó a una pequeña habitación donde había un cadáver, que tenía púas de gusano por todas partes. El niño le habló y le dijo.
-Ya te dije que te reemplazaría.
Tragué saliva.
-¿Por qué le hiciste eso?
-Me quiso abandonar, igual que mis padres.”

(por ESCRITOR/A A MEDIA NOCHE)


“Me adormecí y al despertarme estaba rodeado de gusanos, no sabía qué hacer. Empecé a temblar y noté que estaba llorando. Me bajé de la furgoneta y pensé en lo que podía hacer. Decidí empezar a andar por el camino de vuelta. Solo pensaba en salir de allí cuanto antes. Miré hacia atrás y me sobresalté al ver que me seguían cientos de gusanos espeluznantes. Aligeré el paso. El veneno se había extendido y mi brazo había adquirido un color morado y me abrasaba. Cuando me encontraba agotado y creí desmayarme, aparecieron unas luces, al acercarse comprendí que era un coche. Se paró a mi lado y me gritaron ¡Sube! Salté dentro, descubrí que era el hombre al que le llevé el pedido. Los gusanos nos rodearon y comenzaron a subir por el coche. El hombre soltó una carcajada, bajó la ventanilla y arrojó una botella de gasolina, encendió una cerilla, pisó a fondo el acelerador y arrojó la cerilla por la ventana. Segundos después una gran llamarada iluminó la oscuridad. Sonaron alaridos y supe que jamás olvidaría ese día. Al despertar me encontré en un hospital y supe que no era una pesadilla. Me habían cortado el brazo.”

(por SHIRLEY)