jueves, 25 de noviembre de 2010

La noche del sábado

Ahlam Radouani (1º bach. B) nos regala esta moderna cantiga, alterando el tema tradicional: la voz femenina que habla en el poema no lamenta la ausencia del amigo, sino haberlo conocido. No añora su presencia, sino que está encantada de haberlo perdido de vista:

Oscura noche en que te vi.
Oscura noche en que llegaste a mí.

Dulce sonrisa te dediqué.
Dulce mirada yo me encontré.

Extraña sensación tu enviabas.
Extraña sensación a ti me acercaba.

Maldita sensación la que me atrapó.
Maldita tentación la que nos unió.

Tonta de mí, que contigo fui.
Tonta de mí, que en tu trampa caí.

Cruel engaño a mí llegó.
Cruel engaño me traicionó.

Oscura noche en que te vi.
Oscura noche en que llegaste a mí.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Preso 0477 -AC, un microrrelato para "celebrar" Halloween

(Por Gerónimo López Ríos, Profesor de Literatura)

Aprovechando la importada fiesta de Halloween, propusimos a los alumnos y alumnas de 2º ESO que escribieran sus particulares microrrelatos de misterio. Lee uno de los más destacados, escrito por Javier Vicente Castillo, de 2º ESO -C, a partir de una leyenda urbana:

“Una noche de invierno como cualquier otra, Laura se quedaba hasta tarde con su madre viendo la televisión. A su perro también le gustaba quedarse allí, aunque no entendiera nada. Justo cuando terminaba su serie favorita se iba a dormir pero esa vez se quedó hasta muy tarde viendo una noticia impactante: El preso 0477-AC se ha fugado del manicomio Bellavista. Si consiguen localizarlo contacten con la policía.
-¡Oh mamá! ¿Has visto? Vaya gentuza que pulula por el mundo -dijo Laura.
-Nosotros, por si acaso, cerraremos las ventanas y la puerta con llave.
Laura se tomó su vaso de leche y se fue a dormir. Cada noche Laura apagaba la luz; se tumbaba en la cama junto a su perro (que se quedaba en el suelo) y dejaba caer la mano. Si su perro le lamía la mano significaba que todo iría bien, y si no sería un mal presentimiento. Por suerte se la lamió. A la mañana siguiente Laura fue a la cocina y encontró la cabeza de la madre y del perro en la mesa y en la pared ponía... LOS LOCOS TAMBIÉN SABEMOS LAMER.”

sábado, 20 de noviembre de 2010

"Hoy converso con Miguel"

Tenía un mes de vida Miguel Hernández hace hoy cien años, y tendría toda su (breve) vida por delante. Viviría, como todos, perfectamente inconsciente de su porvenir. Desconocería ese día que conocería la pasión por la poesía, el menosprecio de la “clase poética”, el amor con Josefina, la guerra, la prisión, la enfermedad… Desconocería ese día que tan sólo 32 años después conocería la muerte. Recordamos en el IES Murgi a Miguel Hernández de una forma sencilla: leyendo sus poemas. Concretamente, seis. Simultáneamente en todas las clases, en las de literatura, pero también en las de biología, informática o automoción, al comienzo de cada hora de clase, en voz alta, en la voz de un profesor o de un alumno, de una profesora o de una alumna… a las ocho y cuarto, “Las abarcas desiertas”, a las nueve y cuarto, “Para la libertad (El herido)”, a las diez y cuarto, “Elegía a Ramón Sijé”, a las doce menos cuarto, “Tristes guerras”, a la una menos cuarto, “Tengo estos huesos…”, y a las dos menos cuarto, “Canción última”. En cuarenta aulas a la vez, con la intención de provocar una “conexión poética global”.

En algunas clases, los poemas de Miguel Hernández llegaron envueltos en la música de Serrat… O “Para la libertad”, por ejemplo, en la versión de Manolo García:



Ismail, de 1º bach A, nos recomienda este estupendo ‘Tributo a Miguel Hernández’ del rapero Nach: