viernes, 29 de abril de 2011
sábado, 16 de abril de 2011
viernes, 15 de abril de 2011
Billy Elliot quiere bailar
(Profesora de danza): “Muy bien, niñas, la mano izquierda sobre la barra. ¡Esos brazos! ¡Meted el trasero! ¿A dónde miras, Susan? ¡Arriba, sentid la música, sentidla! No te retrases, Debbie, por favor. Y uno y dos y tres; y cuatro y cinco y seis; y siete y ocho…”
Una ENTREVISTA con Sheila Rodríguez Milán (1º ESO A) sobre la película “Billy Elliot” (que hemos visto en Atención Educativa) y sobre la novela escrita a partir del guión (que está en nuestra Biblioteca de Aula):
¿En qué dirías que se parecen y se diferencian el ballet y el boxeo?
El ballet y el boxeo se parecen en que son deportes en los que se practica la Educación del Cuerpo, ya que los movimientos del cuerpo responden con modos de entrenamiento. Los boxeadores y los bailarines empiezan a formarse desde muy jóvenes, sus carreras son cortas y deben aprender a controlar todos los aspectos de su cuerpo.
Las diferencias serían que el boxeo lo consideran para chicos, ya que es un deporte que consiste en “una forma ritualizada y controlada de violencia”. Por el contrario, el ballet lo consideraban para chicas, ya que en la sociedad existía una gran división de oficios, por ejemplo, si un niño practicaba ballet lo consideraban homosexual.
¿Opinas que hay actividades de chicos y actividades de chicas, trabajos de hombres y trabajos de mujeres?
En la sociedad, según el sexo de las personas, nos asignan tareas o trabajos distintos para los hombres y las mujeres, en función de lo establecido tradicionalmente. Por ejemplo, antes los hombres trabajaban y se encargaban de llevar el salario a casa y las mujeres se encargaban de la casa, los hijos, etc. Los niños jugaban al fútbol y las niñas a las muñecas. Pero hoy en día la igualdad entre los hombres y las mujeres está reconocida en las constituciones, que no permiten discriminar por razón de sexo, raza o religión. Gracias a ello, cada vez más vemos a mujeres investigadoras u hombres que se hacen cargo de las tareas domésticas… o a niñas jugando al fútbol y a niños practicando danza. Y yo opino que cada persona debe hacer lo que le guste.
¿Cómo explicas el cambio de actitud del padre en relación a Billy, que empieza oponiéndose a que baile y, finalmente, le apoya, con lo que ello implica como trabajador en huelga?Al principio, el padre de Billy se oponía porque tanto él como la sociedad pensaban que el ballet era un deporte para chicas y, si lo practicaba, lo consideraban homosexual. Al final decide apoyar a Billy porque cuando lo vio bailar se dio cuenta de que su hijo tenía verdaderas cualidades para la danza.
¿Cómo imaginas la vida de Billy si hubiera cumplido con lo que se supone que su familia y la sociedad esperaban de él? ¿Crees que habría sido feliz si hubiera renunciado a su pasión por bailar?
Imagino que Billy, si hubiera renunciado a bailar, se hubiera dedicado a lo que su familia esperaba de él, pero no sería feliz, porque no estaría haciendo lo que verdaderamente le gustaba, que era bailar...
FICHA TÉCNICA Y ARTÍSTICA DE LA PELÍCULA:
Título original: Billy Elliot
Nacionalidad: Gran Bretaña
Año de producción: 2000
Género: Drama
Dirección: Stephen Daldry
Guión: Lee Hall
Productor: Greg Brenmam y Jonathan Finn
Editor: John Wilson
Fotografía: Brian Tufano
Coreografía: Peter Darling
Sonido: Marck Holding
Vestuario: Stewart Meacham
Maquillaje: Ivana Primorac
Duración: 112 minutos
Reparto:
-Jamie Bell ……………………….Billy Elliot
-Julie Walters …………………Sra. Wilkinson
-Gary Lewis …………………………….Padre
-Jamie Draven……………………. Tony Elliot
-Jean Heywood……………………….. Abuela
-Stuart Wells…………………………… Mikel
-Mike Elliot…………………... George Wilson
-Nicola Blackwell…………………….. Debbie
-Billy Fane……………………. Mr. Braithaker
SINOPSIS:
En 1984, durante una huelga de mineros en el condado de Durham (al norte de Inglaterra), se suceden los enfrentamientos entre piquetes y policía. Entre los mineros más exaltados están Tony y su padre. Éste se ha empeñado en que Billy, su hijo pequeño, reciba clases de boxeo. Pero, aunque el chico tiene un buen juego de piernas, carece por completo de pegada. Un día, en el gimnasio, Billy observa la clase de ballet de la señora Wilkinson, una mujer de carácter severo que lo anima a participar. A partir de ese momento, Billy se dedicará apasionadamente a la danza…
viernes, 8 de abril de 2011
jueves, 7 de abril de 2011
viernes, 1 de abril de 2011
La muerte de la Estrella Polar
Invirtiendo el punto de vista, he aquí otra idea estimulante, a propósito de la relatividad especial: La distancia media a cualquier constelación es de más de doscientos años luz. Luego en el improbable caso de que algunos seres del lado de allá supieran que estamos aquí y pudieran vernos con sus potentes telescopios, sólo verían la luz que abandonó la Tierra hace doscientos años. No nos verían a ti o a mí, sino la Revolución Francesa.
Bill Bryson sigue la luminosa estela (muy apropiada aquí la metáfora) de los grandes divulgadores científicos anglosajones, esos que combinan rigor y amenidad. La lectura de este libro nos ayuda a levantar la vista, o a fijarla –es imposible- en lo más espacialmente insignificante: un protón. Nos ayuda a mirar con otros ojos lo que nos rodea y a nosotros mismos (lo que somos, pero también lo que nos ha llevado a ser lo que somos). La casualidad y la causalidad que han posibilitado nuestro mundo y nuestra vida.
“Bienvenido. Y felicidades. Estoy encantado de que pudieses conseguirlo. Llegar hasta aquí no fue fácil. Lo sé. Y hasta sospecho que fue algo más difícil de lo que tú te crees.” Es la frase que abre el libro y lo que sigue es una explicación de la dificultad y la maravilla.
Algo más sobre El Final: En última instancia somos átomos. Agrupados y organizados de una cierta manera para conformar lo que somos. Y tras el último aliento lo seguiremos siendo: “Cada uno de los átomos que tú posees es casi seguro que ha pasado por varias estrellas y ha formado parte de millones de organismos en el camino que ha recorrido hasta llegar a ser tú. Somos atómicamente tan numerosos y nos reciclamos con tal vigor que, un número significativo de nuestros átomos (…) probablemente pertenecieron alguna vez a Shakespeare (…), por mucho que lo desees, aún no puedes tener nada en común con Elvis Presley. Así que todos somos reencarnaciones, aunque efímeras. Cuando muramos, nuestros átomos se separarán y se irán a buscar nuevos destinos en otros lugares (como parte de una hoja, de otro ser humano o de una gota de rocío).”
Cómic: Daniel López Gutiérrez (guión) & Pablo Carretero Acién (dibujo). Texto: Manuel Gómez Hidalgo